Entre otras cosas, la víctima detalló cómo era la relación con su pareja, admitiendo que había sido privada de su libertad “mediante violencia física y psicológica impidiendo con ello su libre determinación”.
Asimismo, explicó que el hombre sólo le permitía salir para “trabajar, lugar al que la llevaba y la iba a buscar mientras él se quedaba con el niño”, amenazándola y controlando sus conversaciones. El hijo de ambos era utilizado para asegurarse que ella no pidiera auxilio.
La situación se agravaría el 9 de enero pasado cuando le manifestó su deseo de volver al lugar del que era oriunda en la provincia de Chubut. Ello dio origen a diversas agresiones físicas y nuevas amenazas. Fue así que al perder contacto con ella por algunos días, su hermana denunció su desaparición.
Las áreas de género de Río Negro y Chubut y la Oficina de Atención a la Víctima, trabajarán con la mujer buscando su empoderamiento, mientras que la Fiscalía hará lo propio en la pretensión de lograr la mayor sanción penal posible para el imputado.
En este sentido, este sábado, el Ministerio Público Fiscal le formuló cargos al imputado por los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada, lesiones leves agravadas por el vínculo y por haber sido cometidas por un hombre contra una mujer mediando violencia de género y amenazas coactivas.
Además de requerir la formulación de cargos, la Fiscalía enumeró la evidencia, en la que la misma se sustenta y requiere la prisión preventiva del hombre. Todo esto fue admitido por el Juez de Garantías, quien dio apertura a la investigación penal preparatoria y dispuso la medida cautelar que deberá ser cumplida en el Complejo Penal de General Roca, ambas instancias por el término de los próximos cuatro meses.
